Veolia, referente mundial en la gestión optimizada de los recursos, consiguió valorizar un total de 189.103 toneladas de residuos en materia y energía en 2019, además de tratar 269.214 toneladas de residuos. Estas cifras ponen de manifiesto el compromiso de la compañía por promover el desarrollo sostenible de las ciudades e impulsar la economía circular para concienciar sobre la importancia de la lucha contra el cambio climático y la conservación de la biodiversidad.
Veolia diseña y despliega soluciones para la gestión de los residuos líquidos y sólidos, peligrosos y no peligrosos. La experiencia de la compañía cubre todo el ciclo de vida de los residuos, desde la recolección hasta reciclaje, así como la reconversión final de los residuos en materiales o energía. En este sentido, Veolia generó el año pasado 102.235 MW/h eléctricos y térmicos a partir de residuos.
El Centro Integral de Valorización de Residuos del Maresme
Fomentar modelos de crecimiento basados en la economía circular es una labor que nos incumbe a todos, tanto a organismos públicos como privados. La unificación de criterios técnicos y medioambientales regida por la Unión Europea sobre la gestión y tratamiento de residuos establece unas líneas de actuación basadas en la reducción, reutilización, reciclaje, valorización energética y eliminación. En este sentido, la zona del Maresme ha consolidado una tendencia iniciada en los últimos años, en cuanto a los residuos municipales se refiere, en la que ha aumentado el porcentaje de residuos recogidos selectivamente.
A través del Centro Integral de Valorización de Residuos del Maresme, gestionado por la UTE TEM (participada por Veolia en un 47%), se gestionan directamente 280.000 toneladas de residuos al año (además de 41.000 toneladas de otras fracciones que son transferidas) gracias a las plantas de selección, compostaje, metanización y de recuperación energética. De esta forma, el centro no solo recupera materiales reciclables, sino que produce energía eléctrica procedente de la valorización energética de materiales no reciclables, recuperándolos en forma de energía y evitando, así, su disposición en vertedero.
Durante el pasado año, se realizaron distintas mejoras en la planta para incrementar la recuperación de residuos reciclables y la valorización energética, como la instalación de una línea de recuperación de vidrio -que permite reciclar un 2% más- o de quemadores de biogás en las calderas de valorización energética -con los que se produce más vapor que se turbina para generar más electricidad y exportarla a la red-. Además, cuenta con un nuevo separador óptico de gran capacidad que permite aumentar la recuperación, sobre todo, de monodosis metálicos y plásticos.
Fomentar modelos de crecimiento basados en la economía circular es una labor que nos incumbe a todos, tanto a organismos públicos como privados. Desde Veolia, al igual que otras muchas compañías, industrias y organismos públicos, apostamos por hacer realidad esa transformación para seguir creciendo de forma sostenible, señala José Miguel Latasa, director de planta del Centro Integral de Valorización de Residuos del Maresme.